Una encrucijada, un pacto, es la historia de Robert Johnson

5016

Robert Johnson fue un músico de la década de 30 que está en quinto lugar en la lista de los más grandes guitarristas de todos los tiempos, de la revista Rolling Stone. También es acreditado como un maestro del blues. Muchos de los mayores nombres de la historia de la música lo citan como una gran influencia en sus carreras y, según la leyenda, debemos todo esto a un acuerdo con el diablo realizado en una encrucijada.

Robert Leroy Johnson nació de una familia de labradores en Hazlehurst, en Misisipi. Una región marcada por los intensos conflictos raciales y también es cuna del blues norteamericano. La fecha de su nacimiento es imprecisa, siendo que el año más aceptado 1911, está probablemente equivocado. Algunos documentos escolares y certidumbres sugieren fechas entre 1909 y 1912, pero ninguno de ellos cita el año 1911.

La historia de Robert Johnson dice que trabajó en el campo hasta los 16 años, cuando resolvió soltar su tranquila vida de labrador para tocar la gaita y la guitarra. Desde entonces no paro de viajar, tocando en todos los lugares en que pudiera, principalmente en la calle. Con veinte años, Johnson descubrió cómo hacer llorar su guitarra usando el cuello de una botella rota, deslizándolo a lo largo de las cuerdas.

Su carrera profesional duró soló dos años -1936 a 1938- apenas tocando en prostíbulos y bares de baja monta. Soló grabó 29 canciones y no consiguió ningún reconocimiento comercial en su vida. Sin embargo, ganó de sus compañeros músicos el título de «The King of the Delta Blues Singers».

Johnson es una figura importantísima para el blues por la estandarización del formato de 12 compases. Sus canciones fueron regrabadas por diversos artistas como Red Hot Chilli Peppers, Eric Clapton y muchos otros, además de influenciar grandes nombres del blues, como Muddy Waters y Elmore James. Sin embargo, las historias vinculadas a Robert Johnson son tan misteriosas y sorprendentes como su influencia en los músicos actuales.

La leyenda de un pacto en la encrucijada, continua hoy en dia

Una de las grandes leyendas cuenta que Johnson habría vendido el alma al demonio para obtener su talento y su habilidad con la guitarra. La historia de Robert Johnson cuenta que, en una noche sin luna, el joven se aventuró en una encrucijada de Clarksdale, Mississippi, EEUU, no muy lejos de la plantación Dockery.

Cuando se acercó, otra figura hizo lo mismo. El diablo cogió la guitarra de Johnson, la afinó, tocó algunas notas y la devolvió. Desde ese entonces fue agraciado con un talento musical que fue considerado de otro mundo.

Su música como «Me and the Devil Blues», «Hellhound on my Trail» y «Crossroad Blues» han aumentado aún más la creencia en la historia, pues esas canciones tienen alguna alusión al diablo. Y como la reputación de Johnson creció, lo mismo sucedió con la historia.

Tiempo despues, el ídolo del blues «Son» House, comentó sobre la increíble habilidad de Johnson, diciendo: «Él vendió su alma para tocar así.» En la época, la historia de Robert Johnson era a menudo tomada literalmente, y muchos creían que él realmente había hecho un acuerdo con el diablo a cambio de las habilidades que lo harían famoso.

Desandando la historia, sin embargo, se podra ver que la venta de su alma en una encrucijada en una noche sin luna en realidad se deriva de un cuento popular de África Occidental. Según esta leyenda, el negocio sería originalmente cerrado por el espíritu guardián de las carreteras. Con el tiempo, la influencia del cristianismo transformó ese espíritu en Satanás, el diablo.

Precisar en qué encrucijada se encontraba Johnson cuando hizo su supuesto acuerdo, es altamente debatido, pero uno de los lugares más probables sería la encrucijada de Clarksdale Devil en el cruce de la Avenida Desoto y State Street. Hay también la intersección de Dockery Road y Old Highway 8 cerca de Dockery Farms, así como la intersección de las carreteras 1 y 8 en Rosedale.

Los perros del infierno golpean a su puerta, vienen por el

La fuente del talento de Robert Johnson, sin embargo, no es el único aspecto del legendario músico a ser debatida. Nada menos que tres lugares afirman ser su lugar de descanso final: la Iglesia Bautista Misionera Mount Zion, cerca de la ciudad de Morgan, la Iglesia Bautista Misionera Little Zion, en las afueras de Greenwood, y la Capela Payne, cerca de Quito.

Aunque se cree que, debido a la pobreza, la historia de Robert Johnson cuenta que probablemente fue enterrado en una fosa de indigentes o en un campo de alfalfa, la ubicación de su tumba real sigue siendo desconocida. Los cementerios mencionados anteriormente tienen un marcador inscrito con su nombre, aunque se piensa que su tumba no ha sido marcada.

La fecha de su muerte también es imprecisa. Se supone que fue el 16 de agosto de 1938 -a los 27 años-. Hay varias suposiciones sobre su muerte: Johnson bebió whisky envenenado con estricnina, supuestamente preparado por el marido celoso de una de sus amantes. Con el que vino a morir tres días después de envenenado, sufriendo terribles dolores en el estómago durante todo ese tiempo.

Esta sería la razón de que antes de morir, Johnson fue encontrado a cuatro patas, aullando como un perro en el pasillo de la habitación del hotel en el que estaba. Otra historia, dice que murió de sífilis o que lo habían asesinado con un arma de fuego. Su certificado de defunción cita soló “Sin Médico” como causa de la muerte.

La versión legendaria, sería que los perros del infierno habrían aparecido para buscar su alma después del término del plazo estipulado en el pacto que él supuestamente habría realizado en la encrucijada. Con la aproximación de su hora, él habría comenzado a alucinar atormentado por visiones infernales hasta finalmente ser segado a los 27 años de edad.

En fin, hacer pacto con el demonio parece no ser una idea sensata, ya que a pesar de ser extremadamente talentoso, él murió pobre y la gloria y fama mundial soló vino después … ; Así reza la leyenda.